¡COMO PASA EL TIEMPO!
Cuando te “expedientaban” en la Universidad era sabido que habían acabado tus dias como estudiante y tus fantasías profesionales. Finito. Kaput. Liquidado.
La amenaza de "expediente" era una de las más graves, tanto que el vocablo ya anunciaba un grave castigo y no la apertura de un procedimiento administrativo.
Te podían expedientar por muy diversas razones, y era la más frecuente entre ellas la de que te vieras acusado de actividades subversivas (es decir contra el orden instituido).
Hablo de la época franquista por si alguien no se había dado cuenta.
Aplicaban las autoridades universitarias (nombradas a dedo por su fidelidad al régimen de Franco) el reglamento académico que databa de 1954. Sigue vigente.Sí, sigue vigente. Como otras dolorosas realidades.
Conforme el movimiento estudiantil democrático fue fortaleciéndose, y dado que una de sus luchas principales se focalizó en su oposición a los “expedientes”, las citadas autoridades comenzaron a andarse con cuidado: “expedientar” era garantía de conflicto estudiantil prolongado y a veces de dimisiones arrancadas después de huelgas y cierres de facultades.
No todas las facultades tendían por igual (si se me permite decirlo así) al expediente como forma de solucionar los problemas disciplinarios (que también los había, que no todo era lucha antifranquista) con sus respectivos estudiantes. Los expedientes eran un método rancio, de primera presentación injustos, expresión represiva al servicio de un orden sacrosanto. No era casual que con más frecuencia fueran invocados como amenaza por los gobiernos de facultades de largas raíces temporales y sufridas depuraciones postrepublicanas: Geografía e Historia, Derecho, Medicina,…No eran esperables en Económicas, Psicología, Periodismo,…, y otras facultades llenas de fantasías de modernidad y esperanza. Era natural en unas, era como antinatural en otras.
Pasó mucho tiempo pero cambiaron pocas cosas, por lo que se ve. Se vuelve al expediente colectivo, sin cuestionamiento de si ello no será la expresión del fracaso de quienes lo utilizan como método de control y castigo.
No cambiaron muchas cosas. O quizás sí, ahora Psicología ya es también una de las facultades vetustas. Cuando menos en La Laguna.
Neurofox
Es sencillamente increíble que la Universidad de la Laguna haya OPTADO por aplicar un reglamento caduco y represivo en exceso. Porque es exactamente eso, una OPCIÓN de un equipo rector,entre otras muchas que podían haber escogido, como aclarar la situación, si consideraban un error de los estudiantes, sentarse con ellos para convencerlos de su punto de vista ...en fin, muchas otras OPCIONES que la de desempolvar el expedientazo. Y yo me pregunto: ¿quisieron escenificar un castigo ejemplar?
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