Tercera entrega
LOS CAMPOS PARANINFICOS
Ya ha pasado un tiempo. Largo a mi pesar. Pero estoy de mejor ánimo que la última vez, cuando envié la segunda entrega hace más de un mes. Veo las cosas con más claridad después de haber superado un largo catarro que mantuvo mis ojos llorosos desde hace más de dos meses. Las lágrimas ya no dificultan la escritura.
Pero no sólo el ánimo o los trastornos de salud propios del invierno han dificultado el envío de esta entrega. Siento que rastrean, que buscan las conexiones. Saben que han perdido un archivo. Los nuevos ocupantes ministeriales no quieren dejar nada al azar, desconocen lo que se ha perdido y quieren recuperarlo. Los interesados en la desaparición del tapyr lo buscan aunque sólo sea para destruirlo.
Mi vida ya no es como antes. Veo troyanos en donde antes sólo había atenienses. Injerencias en la red donde hay rutinarios cortes de servicio. Informadores en donde sólo hay taxistas. Pero es que los noto cerca y entonces todas las precauciones son pocas. Por eso hoy hago este envío desde una red camuflada. Y, para que quede constancia, tengo la firme sospecha de que el cierre de Megaupload sólo ha sido una tapadera para intentar borrar los archivos que accidentalmente conocí, ya que sé de buena fuente que se había difundido que estaban guardados en sus servidores. Afortunadamente están a buen recaudo en soporte físico y con copia entregada a custodios, que disponen de instrucciones precisas sobre lo que han de hacer si me ocurriera algo más que un catarro (del que sospecho que he sido contagiado intencionalmente, pero de ello no tengo pruebas, lo sé).
Pero estoy de mejor ánimo. Y eso es mucho con la que está cayendo. Sigo vuestro blog y sigue siendo el sitio adecuado para dar a conocer lo que se sabe. Quizás Assange habría tenido mejor suerte de haber podido contar con esta posiblidad, pero aún no es tarde y estamos en ello. A ver.
Hoy transcribo un word datado en una fecha poco clara. Fue modificado en enero de 2006. Parece un texto que quizás sea a medias un informe y a medias un panfleto sensibilizador. Parece ser de encargo ya que en algunos pdf vinculados se recogen documentos escaneados de facturas de taxi y de recibos de alquiler de medios de transporte informales que están firmados con una X común o con firma válida universal mediante huella digital auténtica. Son estos los primeros indicios que descubro acerca de la posible existencia de una contabilidad, que ha de hallarse en algún lugar y que nos dice que, por tanto, debió existir un presupuesto y un plan y alguien autorizándolo. Me tiemblan las orejas sólo con pensar que pueda encontrarse entre esta maraña documental, porque alguien ha debido autorizar el uso de taxis, mulas y bicicletas de montaña para llegar a ese lugar inquietante que figura en los recibos bajo el genérico nombre de “destino:campus”.
Por lo que parece, diversos observadores (¿los que han pedido esos recibos y usado esos transportes?) han ido proporcionando descripciones de los campos paranínficos, cuando después de audaces exploraciones han entregado informes a los que presumo fueron sus contratantes. Eso en el caso de los que han regresado, porque a no pocos se les ha perdido la pista al poco tiempo de adentrarse en territorios que, como veremos, pueden ser temibles. De otros sólo se sabe, a través de escasas notas que, después de rendir informe, han degenerado socialmente al poco tiempo y se han dedicado compulsivamente a la cata de aceite. También consta que en algún caso, sin antecedentes, se manifestaron alteraciones de conducta ferozmente nihilistas que han llegado hasta el rajado en serie de neumáticos sin preferencia alguna por marca. Pero si bien estas alteraciones han puesto a prueba la habilidad clasificatoria de los expertos en lo que le pasa a los demás (los EQPD) no todo ha sido invencible ya que un grupo heterogéneo de trastornados con evolución deteriorante, de origen incierto e intensidad imprecisa, ha podido ser reducido y simplificado, a efectos de estudio y comunicación de lo previamente convenido, mediante la aplicación de la fórmula de reducción de variabilidad supresora de individualización (en su formato profesional avanzado, y a potencia Nn ). El esfuerzo no ha sido poco ni en vano y ha anonimizado totalmente (error casi despreciable) a los sujetos clasificados (ya no se reconocen ni ellos mismos). De esta forma el citado conjunto heterogéneo ha sido dignificado científicamente rescatándolo de la incomunicabilidad científica mediante su inclusión en el grupo de criptotrastornos paraespecíficos de la Guía Diagnóstica Rápida (GDR-RR, revisión febrero) de la AFCEQPD (asociación festivo científica). La consideración de estas transformaciones personales como criptodegeneraciones, independientes de los casos de los fanáticos del aceite o de los reventadores en serie de neumáticos, ha abierto agrias discusiones, con ramificaciones políticas, con los sectores profesionales reintegracionistas y prosentido común que advierten del riesgo estigmatizante, y empobrecedor de la variedad diagnóstica, que sólo satisface al dogma que han denominado “reduccionismo al mínimo”, que también valoran que encubre la intención de mantener oculto el origen común de esos trastornos.
Pero, para lo que aquí importa, toda esa discusión (que llena con notas el texto que realmente interesa y que hace perder el hilo de lo importante) es muy molesta y hasta desagradable, porque unos y otros hacen más o menos lo mismo (según otro sector escéptico) para hacer pasar desapercibidos socialmente a los exploradores afectados.
Este es el texto del archivo word.,
“Asunto: reporte ordenado de las exploraciones de los campos.
Título: los campos paranínficos, una visión desapasionada.
Subtítulo: Síntesis odiosa de informes parciales.
Autor: Comisión específica de informes para subcomisión preparatoria de estudios de planificación (Sección adjunta del Servicio auxiliar de la Subdirección Parcial de Asuntos Generales de la Dirección General de la Subsecretaría de Proyectos, agregada a la Secretaría General por R.D. que modifica la O.M. correspondiente publicada en BOE de 31 de abril de 2004, a efectos de proporcionar seguridad jurídica y no perderse).
Estilo: libre.
Clasificar como: poesía de rechazo.
Los campos paranínficos son como extensiones aparentes, autocontroladamente suaves, provocadores de una primera impresión pacífica en quien no conozca sus peligros. Están habitados por seres diversos entre los que destaca el docindagator. Los integrantes de esta especie son hermosos, admirables, emiten unos sonidos característicos que son como cantos prolongados, luminosos, plenos, llenos de equilibrio y creatividad, que hacen sentir a quien tiene la fortuna de oirlos una sensación sólo comparable al placer que produce la aproximación al conocimiento.
Pero con ellos también existen otros seres terribles: los kalumnior ( los scriptor son una de sus formas evolutivas, y ni mucho menos las más destructiva aunque si la más versátil y oportunista), expertos en la espera y el engaño, ambigüos, con una enorme capacidad debilitante sobre sus presas. Matan con tal lentitud que la víctima escogida desea el final para si misma antes que seguir esperando a que el kalumnior la remate, en el caso de que no acepte convertirse suprimiendo sus últimas capacidades de autonomía mental e incorporandose con su capacidad restante, docilmente, al plan del kalumnior.
Los campos paranínficos son el primer hábitat del tapyr. Eso explica para algunos estudiosos de su comportamiento su tendencia a aproximarse a los límites de la selva sanitaria, aún a riesgo de ser objeto del mortífero ataque de los scriptor. Se cree que lo hacen para mirar, en lo que parece un efecto de la nostalgia, los campos en los que se criaron, y en los que mientras miran ocurren miles de dramas, identificables en el sordo rumor proveniente de los campos conformado por miles de chillidos confusos, desesperados, sorprendidos, producidos en la destrucción de hermosos cantos jóvenes de ejemplares nacientes de docindagator a los que están impidiendo madurar amputándoles el órgano de la opinión. Cantos nacientes truncados en origen por la violenta y despiadada acción anticreativa de los kalumnior, de los scriptor, y de otros depredadores, y ahora destrozados y convertidos, al comienzo de su proceso de transformación, en ruidos roncos, en asentimientos casi agónicos de meros supervivientes.
Pero entre tantas señales de la devastación permanente en curso destacan áreas luminosas sostenidas por los docindagator, bien visibles en la lejanía, casi limpias, llenas de color y frescura.
Hacia ellas miran los tapyr, y cuanto más miran más pareciera que no se ven y más desconocieran el poder y la belleza de su propia voz: tan aparentemente disarmónica, ocasionalmente torpe, progresando como a tientas en ocasiones,…, pero a menudo llena de genialidad, nunca repetitiva.
Los mejores cantos de los campos, como sinfonías, a veces provocan en los tapyres contestaciones que en sus mejores elaboraciones sólo son comparables al jazz. Es entonces cuando la coincidencia de ambos silencia con su abrumadora potencia las llamadas engañosas de los scriptor y de los tapyres abducidos y provoca la atención de los seres desorientados que vagan por la selva sanitaria y por los campos paranínficos. Son momentos de paz, breves, que sólo preceden a otro ciclo de la caza, pero que recrean la esperanza e intimidan y paralizan por un tiempo a los depredadores.
Nota (casi ilegible) …regreso a ningún sitio, no me creerán o me silenciarán…tengo que dejarlo…necesito aceite…no tengo ahora fuerzas para informar del proceso de crianza”.
Deduzco ante esto que en algún otro lugar debe haber información sobre la crianza del tapyr.
Y corto que llevamos demasiado tiempo en conexión.
Netopir Ignóbilis Cundey
Oh, my God! Esta historia me está poniendo los pelos de punta. No sé qué me da más pena, si los tapyres abducidos o los que van librándose de ser cazados pero siguen viviendo en contínua amenaza.
ResponderEliminarÁnimo compañero, continúa desvelando las amenazas a los tapyres y a la selva sanitaria en general.
ResponderEliminarAsí que los peligros están fuera, y a veces
ResponderEliminarDENTRO
(si perdemos el norte)
Esto sólo puede ser obra de un paranoico. Estais para el arrastre. Hay que poner mucha imaginación para ver que tiene que ver este delirium con la psicología.
ResponderEliminarQue los astros os iluminen.
Bueno, en tiempos de hablaba de los "locos lúcidos", aquellos que decían, en su extravío, las verdades que no somos capaces de confesar, divulgar y a veces,ni tan siquiera comprender. El loco como coro griego. Bienvenido sea.
ResponderEliminarHombre, evidentemente no todo es psicología, y al mismo tiempo, la psicología no es ajena a lo que nos rodea (influencia vs poder; orden vs control...)
Es una pena que no se extienda más el humor y la imaginación.
Y es una lástima tu reacción desmesurada. La intensidad suele ir en relación directa con las defensas ante lo que nos resuena personalmente. O ante la conciencia de no haber entendido.
Agradezco, una vez más, que la Mesa no aplique la censura ni en lo que decide publicar como entrada, ni en los comentarios. A pesar de todo.
Tengo la sensación de que eres un "tapyr abducido" aunque no logro distinguir tu subtipo, si eres de los que no consiguieron escapar o de los que se acercaron para ser abducidos por los depredadores.
ResponderEliminarSospecho que eres de los últimos. ¡A César lo que es de César!
Nos entristece comprobar que persisten los prejuicios hacia las personas que padecen enfermedad mental.
ResponderEliminarNos causa una profunda desazón constatar que esas actitudes discriminatorias y ofensivas se dan todavía en los profesionales de la salud (y el anónimo que emplean las palabras "paranoia" y "delirium" sin duda lo es)
Este anónimo ha "arrojado" sin ningún pudor y sensatez, con el afán de ofender a un colectivo profesional, terminología que sólo debe ser utilizada con la mayor cautela y sobre todo con escrupuloso respeto, para dar cuenta de una experiencia de sufrimiento y malestar de una población históricamente vapuleada, discriminada y agredida socialmente como son las personas que sufren patología mental severa.
No creemos necesario aplicar la censura a los comentarios a este blog (ya que confiamos en el respeto de quienes utilizan este espacio para debatir y discrepar en los asuntos que nos conciernen), pero rogamos encarecidamente mantener la responsabilidad de meditar nuestros comentarios para no atacar, NO A LA MESA GALEGA o a cualquier colectivo profesional, sino a quienes tenemos el deber ético de defender con nuestro ejemplo, seriedad y rigor.
El lenguaje no es neutral, no se debe utilizar de una manera "popular o informal" palabras que conocemos y manejamos en el ejercicio de nuestra profesión, ni en los espacios privados y mucho menos en los espacios públicos. No nosotros.
Ante la respuesta de la Mesa, he decidido QUEMAR mi comentario. Resume de una manera elegante, precisa y seria mi respuesta INCENDIARIA.
ResponderEliminarSoy el anónimo que empleó las palabras "locos lúcidos". Pido disculpas por el empleo irreflexivo de esa frase; no podemos contestar, ni siquiera desde la ironía, a comentarios tan fuera de lugar (y no estoy hablando de la intencionalidad del comentario, que todos somos libres de opinar como queramos, sino del desacierto en el lenguaje empleado).
ResponderEliminarMesa Galega: acabáis de dar un ejemplo de buena praxis y de una profunda conciencia ética, no esas falsedades de los que hacen "programas antiestigma" en los que se ve rápidamente la inautenticidad.
Me quito el sombrero.
Totalmente de acuerdo con la Mesa Galega.
ResponderEliminarCreía que sólo era un comentario que intentaba ser sarcástico y burlón (aunque lo del empleo del humor no se le da bien; espero que no lo utilice como herramienta terapéutica), pero las implicaciones que señala la Mesa son mucho más graves.
Y me he quedado pensando en la de veces que yo mismo he cometido errores semejantes (aún sin la intencionalidad ofensiva), que delatan prejuicios que no creía que tenía.
Lo mismo me pasó con la entrada de "empleo y mujeres", cuando les preguntó a pacientes ¿usted trabaja o no? (en vez de preguntar si trabaja fuera o dentro de casa, o en los dos sitios).
si es que tenemos mucho que mirar para dentro...
Cada día me gusta más este blog. Independientemente de nuestros comentarios, que podamos estar de acuerdo o no unos con otros,nos obliga a la reflexión y a la autocrítica en nuestro quehacer profesional. Y eso siempre es positivo, aunque nos fastidie en un primer momento ver que caemos en los mismos errores que la gente de a pie.
ResponderEliminarCreo recordar que, ya en los comienzos de vida de este blog, me planteaba ir a Galicia el próximo verano. Hoy por hoy ya no tengo ninguna duda. Espero poder contagiarme, aunque sólo sea un poco, de vuestro buen hacer.
Gracias por este estupendo blog.
Acabo de daros la enhorabuena en la entrada de ¿dónde está la memoria del COP?.
ResponderEliminarTengo que quitarme el sombrero, como dice algún compañero/a por aquí,al leer vuestra respuesta: directamente al fondo del asunto, sin entrar en discusiones estériles y personalismos.
La pena es que no se retracte (como sí hizo el del "loco lúcido" por algo infinitamente más inofensivo)(diría, en todo caso, que peca éste último, de una visión romántica de la locura, que tampoco ha hecho bien al tratamiento individual y social) .
Ay pobre chaval (el anónimo al que no le gusta el relato). ¿No le contaron cuentos de pequeño? debe ser eso.O que no entiende el lenguaje metafórico. Es una pena
ResponderEliminar