Hoy se ha publicado el Real Decreto-ley 16/2012, de 20 de abril, de medidas urgentes para garantizar la sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud y mejorar la calidad y seguridad de sus prestaciones en medio de una fuerte polémica social.
Dichas reformas conlleva modificaciones de tal calado conceptual como el referido a los titulares del derecho a la protección de la salud y la asistencia sanitaria, asimilando el derecho a la sanidad pública a la afiliación a la Seguridad Social, y no al de ciudadanía como hasta ahora
Para leer con detenimiento, pues, porque nos incumbe a todos:
Necesito que alguien me ayude a orientarme, ¿hoy es 25 de abril de 1912?
ResponderEliminarEs desesperante ser testigo de cómo ideologías propias de otros tiempos se cuelan entre los vericuetos de las "necesidades de ajuste" del estado español. Así era cómo estaba redactado el artículo 3 de la Ley de Cohesión y Calidad del SNS que modifican ahora:
ResponderEliminarArtículo 3. Titulares de los derechos.
1. Son titulares de los derechos a la protección de la salud y a la atención sanitaria los siguientes:
a) Todos los españoles y los extranjeros en el territorio nacional en los términos previstos en el artículo 12de la Ley Orgánica 4/2000.
b) Los nacionales de los Estados miembros de la Unión Europea que tienen los derechos que resulten del derecho comunitario europeo y de los tratados y convenios que se suscriban por el Estado español y les sean de aplicación.
c) Los nacionales de Estados no pertenecientes a la Unión Europea que tienen los derechos que les reconozcan las leyes, los tratados y convenios suscritos.
2. Las Administraciones públicas orientarán sus acciones en materia de salud incorporando medidas activas que impidan la discriminación de cualquier colectivo de población que por razones culturales, lingüísticas, religiosas o sociales tenga especial dificultad para el acceso efectivo a las prestaciones sanitarias del Sistema Nacional de Salud.
Ahora sólo somos asegurados. Y quién no pueda serlo, que se pague un seguro privado.
Están funcionando como un seguro privado de salud, con actividades por las que no tiene que pagar un plus y con otras que sí lo tienen que hacer.
Pero recordemos que la mayor parte de aseguradoras entorpecen o directamente rechazan a las personas que sufren enfermedades crónicas (no compensan como inversión).
Un paciente tiene que hacer diálisis tres veces por semana. No puede ir en su propio coche y no tiene familiares que puedan acercarlo al Hospital donde realiza la diálisis (a 40 Km de casa, por cierto). Es pensionista, por desgracia para él, aunque por fortuna cobra una pensión contributiva aunque escasa en cuantía, pero menos da una piedra.
ResponderEliminarA partir de ahora, tendrá que re-pagar el 10% de los gastos de viaje. Ni siquiera con el tope que han decidido para los medicamentos.
¿Y si no puede correr con todos los gastos que supone su enfermedad, porque además tiene que alimentarse, vestirse y mantener las más básicas necesidades en su hogar?
El gobierno se lavará las manos, ya han hecho bastante considerándolo como asegurado (y eso que les da "pérdidas").
¿ya estamos empezando a echar de menos un gobierno diferente? ¿seguiremos pensando que todas las políticas son iguales y que los nuevos gestores son tecnócratas sin ideología?
no hace falta llegar a 1912. Podrías estar perfectamente a mediados de los 80, antes de la Ley General de Sanidad.
ResponderEliminar¿os dáis cuenta que volvemos a la época de la beneficiencia? Si no trabajas, o eres pensionista, o como mucho parado cobrando la prestación por desempleo, tendrás que ser, o bien un niño o joven de hasta 26 años, o ya adulto, pero:
- Casado/a (y que tu pareja sea trabajador en activo o pensionista)
- O pobre
En el primer caso, dependerás de tu pareja para poder tener acceso a la sanidad pública
En el segundo caso, sentirás que el Estado es caritativo contigo
este Real Decreto es una vergüenza!!!
ResponderEliminarLos partidos políticos deberían ser denunciados por falsedad en documento público cuando no sólo incumplen el programa electoral sino que hacen todo lo contrario a lo que prometieron.
¡lo que está ocurriendo es escandaloso!