Neurofox pide espacio. Gracias por la aportación.
LAS TORPES Y APRESURADAS MANIOBRAS DEL COLEGIO. NI UN ENGAÑO MÁS.
Sólo quien no haya seguido con atención el comportamiento de los dirigentes del COP en estos años de grave conflicto en la Psicología Española puede sorprenderse del llamamiento realizado a la colaboración (¿con el COP, y hecho por el COP?) de diferentes organizaciones de la psicología clínica.
Más allá de que una de las convocadas (y que va a decir que sí a la propuesta, claro) es la SEPCyS, que es la única de la que el COP hace una más que sospechosa propaganda en la pestaña “enlaces” de su web del Consejo (cosa que no ha de extrañarnos porque fue en su dia un tingladillo creado por Serafín Lemos que fue cargo en la misma, hoy director de Papeles del Colegio y miembro de la nomenklatura del COP, para intentar rivalizar con otras asociaciones científicas con el objetivo evidente de conseguir un puesto para calentar la silla en la Comisión Nacional de la Especialidad), destaca que se dirijan a asociaciones que han silenciado en los órganos informativos de todos en todos estos años (cuando no había ningún conflicto en la psicología española, ¿recordais?), e ignorando por supuesto a la Mesa Galega (lo que no creo que la ofenda).
Pero ¿a qué viene esto ahora?, y ¿de quién viene?.
Hace años, en una reunión de uno de los máximos órganos colegiales asistí estupefacto a un razonamiento de algunos de nuestros profesionales del aparato colegial en el que, para explicar una estrategia corporativa sobre una cuestión del exclusivo interés de algún pequeño sector de los psicólogos (es que lo nuestro es lo que es, poco en términos globales aunque mucho en nuestras vidas), remitían su inspiración y la comparaban ¡a la Perestroika! y pensaban desde lo que se imaginaban era ¡la visión de Gorbachov!. Yo pensé: o éstos juegan a la guerra,...,o a la política por otros medios que me son desconocidos. Y no volví.
Viene esto a cuento de la búsqueda de la respuesta a las preguntas anteriores.
Fijaos: el día 7 de octubre a las 14:32 se elabora el pdf con la carta (veáse propiedades del archivo) que, sin membrete ni sello oficial ni fecha, dicen haber remitido desde el COP a los representantes de las asociaciones citadas. A esa hora ese mismo dia la manifestación de la psicología clínica ante el Ministerio de Sanidad está ya cerca de finalizar. Ya se sabía de su éxito. Y también de sus lemas, que además de grado-máster-PIR planteaban libertad de asociación-libertad de colegiación y también no nos representan al lado de formación de calidad=calidad asistencial y contra el recorte de los derechos sanitarios. Y ya en los dias anteriores había sido desvelado el doble juego del COP, con la cuestión del acceso al PIR desde el máster y sus ambigüedades respecto al futuro de la asistencia sanitaria prestada por la psicología clínica.
De la urgencia de la carta poco hai que decir, parece que sus autores tenían prisa por definir la posición, ¿o quizás por dividir de nuevo a las asociaciones democráticas y críticas con el COP?.
Esa carta a las asociaciones la firma (es un suponer) un “desaparecido” Santolaya (Presidente dice, que parece que se lo dice a si mismo) durante todo el conflicto por la traición del COP en la relación con el Senado, que además no ha abierto la boca (incluso aún buscándole algún medio de comunicación) mientras el caudillo Fernando Chacón ha campado a sus anchas ocupando un espacio de responsabilidades colegiales que, cuando menos, o usurpaba o le eran cedidas sin derecho. ¿Emula Santolaya a Rajoy en un delirio similar al que se trasluce cuando en el pasado se tenia como referencia a Gorbachov?. ¿Quiere trabajar la política colegial con la ambigüedad y el silencio tal como lo hace el que parece su modelo oculto?. ¿Es su personalidad un “como si”?. ¿Se conoce?. ¿Se desconoce?. ¿Quiere despistar?. ¿Esta despistado?. ¿Se quiere hacer el gallego para neutralizar a la Mesa? (es coña, no soy Durán i Lleida). ¿Quiere pasar por ser el bueno y unitario, o por el que no se entera?. ¿No controla a Fernando Chacón?. Sé que ésto es de apariencia un poco idiota, pero el alma humana es insondable y misteriosa...sin los instrumentos y conocimientos adecuados claro, y también si uno es ingenuo. Fijaos: el bueno y el malo, el alto y el bajo, el moderado y el colérico, el ilustrísimo y el caudillo (sin ánimo de ofender y sometiéndome cuidadosamente al diccionario de la RAE, faltaría más), el silencioso y el charlatán (por lo del gusto a los medios de comunicación, aclaro),..., y a ver si libro sin una denuncia dada la proclividad del citado.
Propongo colgar la carta para evitar que la modifiquen (ésto lo aprendí en los primeros años del conflicto creado por el COP cuando reescribían sus escritos, en la web que debía ser de todos, conforme iban ajustando sus intereses).
(este es el enlace a la carta solicitado por Neurofox)
El COP pretende de nuevo la foto que logró en la jornada de marzo, y que con seguridad fue utilizada para presentarse ante el Ministerio como representante de la profesión, y probablemente también causante en no poca medida de que ahora nos veamos así:
La escenificación teatral creada por el COP en ese encuentro con las asociaciones le facilita el que hoy se presente como el lugar de acogida de toda la psicología, como si tal cosa, como si no hubiera pasado nada en estos años, como si ahora fuera una organización democrática justo cuando se les cuestiona radicalmente su legitimidad y representatividad por primera vez en su historia. Y cuando sobran motivos para ello.
El COP ha manipulado, mentido, engañado, usurpado la propiedad común y traicionado a la psicología española. Ha entorpecido gravemente su progreso haciéndole perder ocho años de desarrollo decisivos, y no sólo en la psicología clínica sino en todas las áreas de intervención.
El pasado dia 7 el Director General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad se dignó a recibir a otros diferentes al COP porque tenía delante del Ministerio a una manifestación, que hacía visible tanto la diversidad de la psicología como la connivencia política sostenida por el Ministerio en su último período con el corporativismo antidemocrático (al que, por lo demás, se habían enfrentado los anteriores equipos ministeriales).
La psicología española tiene el mismo problema que el resto de la sociedad: carece de democracia y su representación está usurpada por apegados al poder y a los privilegios de los que disfrutan los cargos colegiales pagados por todos. Sentarse con los actuales dirigentes del COP sólo puede facilitarles la elusión de sus responsabilidades por todo lo hecho (aún pendiente de clarificar en todos sus extremos, y sino considérese la situación de la emisión de certificados de contenido presuntamente falso para la obtención del título de especialista), y darles más fuerzas y más alas para que continúen manteniendo la iniciativa en el daño al desarrollo de la psicología clínica.
Pero muchos estamos en ello. Con coraje cívico. Como corresponde a la gravedad de los tiempos. ¡Indignados!.
EL COLEGIO NO NOS REPRESENTA.
LIBERTAD DE ASOCIACIÓN.
TRANSPARENCIA COLEGIAL.
Neurofox
Creo que no hay nada que añadir a lo que expone Neurofox. Yo también estuve allí, y cuando vi hoy el Infocop me quedé estupefacta ante tal desfachated. ¿Indignada? Indignada, cabreada, alucinada, anonadada... Y es que lo del COP ¡no tiene precio!
ResponderEliminarEl colegio no ¡no nos representa!
ResponderEliminarYa que no me habéis dejado QUEMAR el Ministerio, podía QUEMAR el COP. ¿Qué os parece?
ResponderEliminarLo que dije como comentario en otra entrada, pero resumido:
ResponderEliminar"RECOGER FIRMAS PARA PEDIR LA DIMISIÓN DE LA CÚPULA DEL CGCOP"
No sería justo meter a todos los colegios autonómicos en el mismo saco que el Consejo de COPs, pero lo cierto es que quedan en entredicho si no se posicionan de una manera firme y contundente ante lo que parece ser un comportamiento antidemocrático de su cúpula.
Como ya sabemos todos: ES IMPOSIBLE NO COMUNICAR. Quedarse callado es aceptar una irregularidad, la falta de transparencia y la necesaria renovación de cargos, nuevos proyectos, nuevas voluntades de cambio.