Tenía que acabar así.
Y AÚN HAY MÁS (en este enlace se encuentra el "enganche" a este culebrón a través de todas las entradas que sobre el tema publicó este blog)
No había caso para sostener. La denuncia sólo era una
expresión inadecuada de la frustración, y de la insuficiente resistencia de sus
autores a la misma. También es cierto que, observada en su evolución, como con
los mejores diagnosticos, es toda una expresión casi obscena de rasgos (bueno,
mejor de rasgo, del que tiene) de personalidad.
La pieza para la que se reclamó
propiedad intelectual (sic), con amenaza para este blog incluida (por el generoso acto de darla a conocer), solo quedó en
un obra apenas artesanal que bien merecería el título de “disgresión vespertina a propósito de una
interpretación personal del derecho: sobre la falsedad ideológica y su relación
con casi todo”.
¡Cómo son sus señorías! , son tan generosas con los que aún
creen que el Derecho es cosa de palabras más o menos bien unidas
sintácticamente que ni le cargan costas. A pesar de que gasto si hicieron.
Bien está lo que bien acaba. No vamos a ser nosotras quienes
animemos a hacer sangre (peropordios, tú no te lo tomes por lo literal, ¡es matafórico!) con los que tanto tiempo han perdido,..., y han hecho perder.
Pero malos si que eran. Las intenciones eran de las peores. Aquello de inhabilitar,
o enfangar vidas profesionales casi completas no era de buena gente. Pero,
¡ale!, a otra cosa. Que crezcan o que desparezcan. Allá ellos.
Pero, para desmemoriados que quisieran creer que aquí no
pasó nada: relacionados con esta grave querella estuvieron figuras que ocupan
cargos destacados, que oportunamente se alejaron de estos focos, y que siguen
gobernando en la psicología lo que es de todos. Son los que animaron a
interponer denuncias, impugnaciones, pleitos,..., y que hasta ahora sólo
provocaron que otros perdieran su dinero, su tiempo, y la psicología española y
la organización colegial gastara enormes cantidades de prestigio, recursos y
esfuerzo en conflictos que a la postre solo fueron útiles para sostener sus
apoltronados culos.
A esos no los olvidamos. Con esos no vamos a ninguna parte.
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¡Bravo!
ResponderEliminar¿De qué estais hablando? Creo que me he perdido.
ResponderEliminarHaz click encima de los enlaces en azul "y aún hay más" (y ahí, si quieres, en los enlaces en azul que contine esa entrada con la historia del folletín que nos han regalado los denunciantes). También haz click en "sentencia final" para ver lo que piensan los jueces de esta historia.
ResponderEliminarY, por favor, visita con más frecuencia este blog para seguir lo que nos pasa.
Gracias. Tuve un problema con mi ordenador y no enganchaba los enlaces.
ResponderEliminarY sí visito el blog con frecuencia, pero vais demasiado rápido para mi. O a lo mejor es que las cosas van demasiado rápidas y vosotros sólo mantenéis el ritmo.
O quizás nada va rápido, ya que no veo avances, y mi mente quiere que si vayan...
Uff, qué lío me estoy montando!!!